MISIÓN SOBREVIVIR
De inmediato salí corriendo de la terminal, sabía que no tenía
ningún caso quedarme ayudar a eso pobres tipos, afuera era peor, la muerte se
sentía en el ambiente, mire hacia dentro de la terminal esos devora hombres
estaban dándose un festín de vísceras y entrañas, al lado de la puerta estaba
una escoba y un trapeador, junto a ellos un recipiente de esos amarillos donde
ponen agua y pasan el trapeador por una especie de prensa para quitarle el
exceso de agua, me acerque a ellos, vi que el recipiente tenia agua con jabón,
según mi conocimiento sobre los zombie, no tienen suficientes capacidades
motoras como para abrir una puerta, subir las escaleras, no piensan, si
derribas a un zombie este quedara en el piso, pues no sabe levantarse, así que
me arme de valor tome el reciente y di un fuerte chiflido, de inmediato los dos
zombies voltearon a verme y se dirigieron hacia mí, arroje el recipiente cerca
de ellos y el agua con jabón se esparció por el piso, al tratar de caminar por
ahí los zombies se cayeron, al estar resbaloso el piso no pudieron avanzar,
tome la escoba y con ayuda de mi pierna la partí en dos pedazos por serte quedo
como la quería, con una punta, me pare cerca de ellos pero lo suficiente mente
lejos como para que no me alcanzaran y no convertirme en uno de ellos, di un
grito para descargar la adrenalina del momento y le encaje el palo de escoba en
la cabeza a uno de ellos. Me faltaba uno, la hermana del chófer realmente me
dio un poco de lastima era una chica muy guapa, aunque ahora un beso de ella sería
un beso mortal, la mire como se trataba de arrastrar para darme una mordida, tome
el otro extremo de la escoba y con un golpe eficaz se lo encaje en el cráneo. De inmediato salí de ahí, no era
algo que me gustara tanto, a pesar de ser un gran fan, no era lo mismo volarle
la cabeza con una escopeta a un zombie en resident evil 2, que encajarle un
palo de escoba a uno en la vida real.
La calle se veía desolada, nadie a quien preguntar qué
pasaba?, no tenía a donde ir, la casa que rentaba estaba bastante lejos de la
terminal, y no sabía cómo llegar desde donde estaba, mire hacia la izquierda y
en el semáforo estaba una anuncio que decía, HOY PARA CELEBRAR EL NUEVO SEMESTRE
ASISTE A UNIZOMBIE, EN LA UNISON, ACOMPÁÑANOS SI PUEDES ESCAPAR DE LOS ZOMBIES
SERAS CAPAZ DE PASAR EL SEMESTRE, acompañado de ese anuncio estaba una flecha
que indicaba como llegar a la UNISON, desde la universidad ya sabía el camino
hacia la casa, así que decidí tomar ese camino, antes de ello saque los palos
de los cráneos de los zombies y tome el trapeador, le arranque la parte que se
mete al agua, y me quede con un palo largo, el cual me podría servir como arma,
me arme de valor y fui camino a la UNISON.
Estaba algo lejos, durante el trayecto veía negocios,
algunos saqueados, otros incendiados, autos volcados, algunos con sus
tripulante dentro, muertos por supuesto, me fijaba en cada uno para ver si
tenían algo que me pudiera servir como arma, al parecer ellos simplemente iban
a alguna parte como cualquier otro día y se toparon con esta sorpresa. Las
luces rojas y azules de una patrulla iluminaron mi pupila, estaba a 3 cuadras
de mí, me dirigí hacia ella con esperanza de encontrar algo, lo primero que
note es que uno de los oficiales estaba en su interior, recostado sobre el
volante, el vidrio delantero estaba destruido, y había restos de sangre en todo
el interior de la patrulla, el policía aun tenía su pistola en la funda, con
mucho cuidado acercaba mi mano hacia ella para tomarla, un grito de terror me
puso los pelos de punta e hizo de retirara mi mano de la pistola que ya tenía
prácticamente en mi mano, AUXILIO¡¡¡¡¡, era el radio de la patrulla de donde
provenía ese grito, A TODAS LAS UNIDADES SE LES NECESITA EN LA COMISARIA, ES
UNA EMERGENCIA, NECESITAMOS REFUERZOS, AYÚDENNOS POR EL AMOR DE DIOS¡¡¡,pero no
solo se escucho eso, también se escuchaban disparos, ordenes que les daban a
los oficiales, incluso me pareció escuchar rezos. Después de un rato, la radio
perdió la señal, sabía que si alguno de esos muertos hambrientos estaba cerca
habría escuchado el sonido de la radio y se dirigiría hacia la patrulla, así
que en un movimiento rápido tome el arma, tenia 6 balas, busque mas en toda la
patrulla, pero no encontré nada, mejor me fui de ahí, camine 6 cuadras mas cuando
vi delante de mí a uno de esos monstruos, el no se había percatado de mi
presencia, así que camine de forma sigilosa, casi sin hacer ningún ruido al
caminar, yo iba pegado a un cerco de una casa se veía que los dueños eran de
dinero, era de dos pisos, con una fachada muy bonita, además de 2 carros último
modelo estacionados en una cochera que tenia la puerta abierta, camina sin
hacer ruido, cuando de pronto un ladrido me sorprendió, era un perro que me
ladraba, un pastor alemán con su ladrido feroz y enojado, por suerte no podía
hacerme nada gracias al cerco, pero el hambriento zombie escucho el ladrido y
se dirigió hacia donde estaba yo y el perro, pensé, es solo uno puedo contra
uno, pero cuál fue mi asombro al ver que de las casas, las tiendas, de debajo de los automóviles salían más y más
de estos caníbales. Eran demasiados, 6 balas en la pistola, 4 palos, y un solo
hombre no era suficiente para acabar con tantos zombies, eso sin mencionar que
nunca había disparado una pistola en mi vida, cada vez se acercaban mas, yo
seguía pensando en que hacer, el perro no dejaba de ladrar, fue entonces cuando
pensé que si lo callaba, y yo no hacia ningún ruido, era probable que se
fueran.
Me voltee hacia el perro, tome la pistola, apunte directo a
su cabeza, el no dejaba de gruñirme, puse mi dedo en el gatillo, pero no puede
hacerlo, ese perro solo trataba de proteger su propiedad en una situación donde
de seguro sus dueños habrían muerto, si se le puede decir así, mire detrás mío,
y los zombies estaban muy cerca, la casa tenía el perímetro muy seguro, una vez
dentro ningún zombie podría entrar, así que abrí la puerta con el peligro de
que el perro se abalanzar sobre mí, pero este salió y ataco a los zombies, yo
de inmediato entre a la casa, iba a cerrar la puerta pero mire al perro atacar
sin miedo, Ven acá¡¡- le grite-. El me entendió y de inmediato dejo de atacar y
se metió a la casa, cerré la puerta del patio deprisa, los hambrientos
monstruos chocaron contra el cerco, estiraban sus manos en un intento de poder
atraparnos y comer nuestra carne aun viva.
Me sentía hambriento, ya eran cerca de 7 horas que no probaba
bocado, el perro se apego a mí, meneaba su cola, como si se alegrara de verme, decidí
buscar algo de comida para mí y para el dentro de la casa, incluso ahí dentro
obtendría algún arma como cuchillos, tal vez algún machete, con suerte un arma,
la puerta estaba abierta, lentamente entre, mirando a todas partes en busca de
señales de vida. Nada, la casa estaba sola, me dirigí a la cocina, para mi
suerte el refrigerador estaba lleno, me prepare un sándwich con doble jamón, me
serví un vaso de refresco, y para el perro le di un gran trozo de carne junto
con sus croquetas.
Le llame para que viniera a comer, pero no venia, lo fui a
buscar, estaba en el segundo piso, en el baño, al lado de la bañera, estaba
acostado en el piso, se le veía triste, sus lamentos me lo confirmaron, mire
dentro de la bañera y estaba una muchacha, de 19 años aproximadamente, muy
guapa, con cabello castaño y ondulado, su maquillaje estaba corrido como si
hubiera estado llorando, su cabeza tenía un gran golpe, pero parecía que había
muerto por una sobredosis, había botellas de diversas pastillas vacías alrededor de ella, pero por que
estaba sola?, después recordé su rostro, ella iba en la UNISON, justo al lado
de mi salón, también estudiaba psicología, recuerdo que solo le dirigí la
palabra una vez, y fue cuando estábamos sacando copias, ella me pregunto si tenía
feria de $100, ya que no quería pagar con un billete de esa cantidad por problemas con el cambio, yo si traía, le di un billete de $50, 2 de $20 y una
moneda de $10, aquí tienes le dije, gracias, respondió. No fue una interacción
muy profunda pero yo difícilmente olvido un rostro, aun si no hubiéramos
dirigido la palabra me hubiera acordado quien es ella. No había nada que hacer
por ella, salvo un entierro descante, la tome en brazos, y la lleve al patio
trasero, busque una pala, y encontré una en un armario lleno de herramientas,
eso me alegro, Salí al patio trasero, he hice un hoyo profundo, puse a la chica
en él, y la enterré, ni siquiera sabía su nombre, aun así le puse una flor, que
descanses en paz- dije- y me dirigí de nuevo al interior de la casa, tome un
machete del armario, un hacha chica, y seguí buscando en la casa, llegue a un
salón en el segundo piso, tenía un aire oriental, letras que supongo eran
chinas o japonesas, arboles de bambú, y en la pared, dos espadas, con su
respectivo estuche, catana según creo que se llaman, deje el hacha y tome una
espada, la saque del estuche, era impresionante, su filo la hacía brillar,
practique un poco atacando a las plantas de bambú que estaban en la habitación,
me sentía preparado para salir y enfrentar a los zombies si es necesario. Mire
por la ventana y vi como la horda de zombies seguía en la entrada de la casa tratando de entrar. Baje a la sala, ahí encontré una carta que decía:
Para mama y papa.
Me recuerdan?, soy su hija Lucy, la que tiene 19 años casi
por cumplir los 20, que estudia psicología en la UNISON, ya recordaron?. Creo
que no, ni siquiera recuerdan que tienen una hija, solo se acuerdan del gran
empresario que es su hijo Jorge, él ni siquiera vive aquí, él hizo su vida en
Londres y no le importo, ahora no se qué harán, si su gran hijo y favorito está
lejos, y yo, su niña, como me decían en algún tiempo, no estará más. Aun recuerdo esos años con
cariño, cuando iban por mí al jardín de niños y me recibían con una sonrisa y
un beso en la mejilla, cuando papa me leía un cuento antes de dormir, o incluso
cuando me quedaba dormida en el sofá en sus brazos me llevaba a la cama y me
daba el beso de buenas noches, siempre me lo daba, a veces que llegaba tarde
del trabajo y yo ya estaba dormida se metía a escondidas a mi cuarto y me daba
el beso, yo fingía estar dormida pero en realidad no podía dormir sin ese beso.
Como sea esos tiempos quedaron en el pasado, cuando Jorge se fue, pareciera que
su amor se fue con él, ya ni siquiera iban por mí a la secundaria, en lugar de
eso me compraron un carro y pusieron chófer tal vez era la sensación en toda
la secundaria pero eso a mí no me importaba, yo quería que mis padres fueran
por mí como los otros chicos y chicas de mi escuela y de cualquier otra, y
conforme pasaba el tiempo menos los veía, cuando me iba a la escuela solo yo
despertaba, cuando regresaba, no había nadie, le pedía al chófer que fuéramos a
un restaurante antes para comer algo, tal vez por eso el refrigerador siempre
estaba lleno, pues nadie comía en casa, papa se pasaba el día en la oficina, le
pedía a su secretaria que le pidiera algo de comer, a pesar de estar todo el
día en su trabajo no ganaba más, mama, que no tenía necesidad de trabajar
decidió hacerlo, la directora de una escuela de tiempo completo, de 8 de la
mañana a 9 de la noche, y después se iba a tomar un café con sus amigas, todo
el tiempo estaba sola, aprendí a manejar, le pedí a Roberto el chófer que me
enseñara, he hicimos un trato, el me enseñaba a manejar y yo le seguía dando el
sueldo normal, pero sin la necesidad de venir y llevarme a donde yo quiera,
apuesto que ni siquiera sabían que Roberto no se ha presentado a trabajar en 3
años, y ustedes seguían dejando el dinero conmigo para que se lo diera, que si
se lo daba, ese era el trato, su familia vive mejor, Roberto tiene otro trabajo
y además ustedes le daban dinero gratis, al menos estaban ayudando a alguien,
aunque fuera sin saberlo, pero ahora su ex niña, ya no cree soportar esto mas,
leí su recado que se irían de vacaciones a Londres a visitar a mi hermano, ni
siquiera me preguntaron si quería ir, solo tomaron el primer vuelo disponible y
se fueron, pues cuando regresen, si regresan, de seguro me encontraran tirada
en el piso de la casa, muerta, la única razón por la que me duele hacer esto es
por polilla, el único amigo que he tenido, el que siempre se alegra de verme, y
siempre está aquí esperándome, espero que lleguen y lo encuentren vivo, y se
hagan cargo de él, como si fuera esa hija que alguna vez tuvieron.
Se despide de ustedes, Lucy, espero ya hayan recordado quien
soy yo.
Sin duda una carta muy triste, no tenía idea que esta chica, Lucy, tenía problemas tan graves, cuando nos topamos en la copiadora parecía
ser una chica normal, con problemas como todos, pero nada tan serio, realmente
me sentí mal por no haberme dado cuenta y no haber hecho algo para ayudarla. Salí al patio
trasero, polilla aun estaba recostado en el suelo, triste, lamentando la muerte
de su amiga Lucy. Polilla, me tengo que ir, vienes con migo?- mi pregunta era
como si le estuviera hablando a un ser humano, aunque para Lucy parecía que si
lo era- polilla se levanto miro a la tumba donde estaba Lucy enterrada y se dirigió
hacia mí, ahora yo cuidare de ti,le dije mientras acariciaba su cabeza, busque
las llaves de los autos por todas partes, en la sala, la cocina, la recamara de
Lucy, pero nada, entonces se me ocurrió, polilla las llaves del carro, el perro
se dirigió al carro y empezó a ladrar, Lucy había hecho lazos tan grandes con este
perro que sabía que siempre estaban ahí dentro, efectivamente incluso estaban puestas. Maniobre el carro para ponerlo de frente, presione el botón
del control para abrir la puerta del patio, cuando hubo suficiente espacio para que el
carro saliera acelere, los zombies ya estaban entrando, pero el poder el auto
era mayor y solo se veían sus cuerpos putrefactos volar, ya en la calle seguí
el camino hacia la UNISON, dejando detrás de mí las hambrientas fauces del
peligro.